El número de parejas divorciadas en España creció un 6,9% en 2014 si lo comparamos con las cifras del 2013. Este aumento tan importante de un año a otro ha ocurrido otras veces, la última vez en 2007, este fue el último año de bonanza económica. Y es que parece que la crisis ha podido frenar los divorcios durante unos años, ya que una inseguridad en lo económico hace que ciertas parejas puedan aguantar por miedo a la inestabilidad. 

Una cifra significativa es que la media nacional de demandas de divorcio en 2014 fue de 2,9 por cada mil habitantes. Las últimas cifras indican que en cuanto a comunidades algunas se encuentran bastante por encima de ese dato y otras por debajo del mismo: la que más ha subido ha sido Canarias (3,3), seguida de la Comunidad Valenciana (3,2) y Cataluña (3,1). 

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